Desde que era un adolescente. Introvertido y delgado como el tallo de un junco y con los nervios siempre a flor de piel, manifestaba su afición por lo poco convencional.
Apasionado y un incasable amante de la inteligencia y la potencialización de ella cada día. Su eterno amor, una computadora, su mejor amigo un celular y su conciencia la programación. Este joven cree que las ideas innovadoras triunfan por su propio peso y claramente por la confianza que se le de a ellas.
Para crear esta empresa no lo pensó dos veces, dejó a un lado lo convencional pasando de ser un adolecente a ser un empresario. Se aventuró a vivir en el mundo de la competencia organizacional. teniendo en cuenta los avances tecnológicos no dudó en hacer de su eterno amor su sustento, su diario y la razón por la cual se levantaba cada día; salía a crear su mundo, el mundo que para èl lo iba a llevar a hacer un mundo mejor junto con un mouse, un teclado y un lenguaje que sólo el podría entender.
Muchos piensan en el glamour, en la rumba del fin de semana, en formar una familia, él piensa como hacer que su idea (su empresa) sea la idea de muchos y pueda ser escuchada, leída transmitida y lo más importante usada. Aunque para ello deba renunciar a cosas, ser humilde, discreto y muy profesional. Los “Geeks” de este mundo mantienen secretos de confidencialidad , pero sobre todo jamás dejan de soñar. Y todo esto se logra trabajando en equipo, teniendo hambre de conocimientos, pasión por actualizarse y ser un excelente líder que muestre que los sueños pueden hacerse realidad.
Los emprendedores tienen dentro de sí una especie de actitud contagiosa, un empuje vital que brota natural de ellos mismos, porque buscan convertir en realidad, el sueño que siempre les ha acompañado. Y no cabe la menor duda que, algún día, lo conseguirán.